VMOS: inversión estratégica para el desarrollo de la pesca artesanal en SAO

El proyecto, consensuado con representantes del sector artesanal, responde a una necesidad concreta: extender la vida útil de las capturas y aumentar su calidad y rentabilidad, especialmente en un contexto de escasez de recursos y alta perecibilidad de especies como el langostino, el cangrejo nadador, el pulpito o la panopea. La posibilidad de procesar los productos localmente abre nuevas oportunidades de comercialización, mejora los ingresos de los pescadores y potencia el trabajo de las cooperativas que transforman la materia prima.

Según explicó el Ministro de Desarrollo Económico y Productivo, Carlos Banacloy, esta obra representa una decisión política de fortalecer al sector artesanal mediante la incorporación de tecnología: “Con VMOS se va a comprar un equipo para congelar y una cámara de mantenimiento de productos congelados para la terminal pesquera artesanal. Es un proyecto que veníamos desarrollando desde hace tiempo, de gran importancia para el sector artesanal en San Antonio”.

Aseguró que “nos va a permitir dar un salto cualitativo en el aprovechamiento de los recursos del Golfo, sobre todo en un escenario donde es clave hacer más con lo que hay disponible”.

La incorporación de frío —que incluirá un túnel de congelado y una cámara totalmente equipada— es un paso clave para que San Antonio Oeste deje de depender de otras localidades para culminar el procesamiento. Actualmente, buena parte del langostino, los pulpos y los mariscos se trasladan a otras plantas para su congelado o envasado final, lo que reduce los márgenes de ganancia y limita el trabajo local.

La nueva infraestructura permitirá, por ejemplo, procesar y conservar filetes de pescado, colas de langostino y moluscos con calidad de góndola. Esto no solo amplía las posibilidades comerciales, sino que también habilita el acceso a mercados más exigentes, como la gastronomía gourmet o el comercio minorista de productos terminados. A futuro, incluso se proyecta sumar equipamiento para elaborar conservas y escabeches artesanales, fortaleciendo el perfil productivo de la terminal.

Para Enrique Dowbley, representante de los pescadores artesanales, la obra es mucho más que una mejora técnica: “La idea es no sacar mucho recurso, sino aprovechar mejor lo que tenemos, hacer el producto final desde acá, no que lo haga otro en Buenos Aires. Eso nos permite generar trabajo local y nuevos canales de venta. Necesitamos mover la actividad y esta inversión es un avance muy importante para lograrlo”.

La Terminal Pesquera Artesanal Marítima funciona en el muelle “Eleno Arcángel” y es un establecimiento de la provincia administrado de forma conjunta entre el Gobierno Provincial, el Municipio de San Antonio y el sector pesquero artesanal. La planta cuenta con habilitación sanitaria de SENASA para exportar a destinos como Chile o Brasil.

Allí operan pescadores autorizados por la autoridad de aplicación, con procesos tercerizados a la cooperativa Ría y Mar LTDA. Durante 2024, ingresaron más de 970 toneladas, principalmente de langostino, merluza y moluscos bivalvos.

Esta inversión marca un hito en la estrategia provincial de industrializar los recursos pesqueros en origen, integrando trabajo, identidad productiva y sustentabilidad. La expectativa del sector es que los fondos lleguen pronto y que las obras permitan ver, en poco tiempo, los primeros productos artesanales congelados listos para posicionarse en nuevos mercados.